El rito de iniciación masónico al que te voy a someter

Hay quienes dicen que, los que nos dedicamos al campo de la salud, en ocasiones, parecemos una secta. Y en cierto aspecto, estoy hasta de acuerdo.


Caso muy sonado, últimamente, es del movimiento Real Food. Encuentro que su filosofía es una buena aportación. “Come la máxima cantidad de comida real que puedas y evita los procesados”

Tiene sentido.


Pero ojo, en el momento en el que te vuelves obsesivo con sus ideas, que no permites que se dude ni un milímetro de sus dogmas y tu actitud es de “O estás conmigo o contra mí”, entonces malo.
Y no digo que los creadores de esta movida tengan esa actitud. Pero ya sabes, la población siempre se polariza con temas polémicos.


Así que yo, que soy un obsesivo-compulsivo, y por eso envío un correo cada día, estoy pensando en montar una secta.

Ya tengo pensado un decálogo. He inventado un Dios. Y como no, tengo un rito de iniciación.



Buscando ideas, he encontrado que los masones tienen una ceremonia de iniciación de 5 días. Y en el primero, hay una prueba de resistencia física y mental.

Te ponen algo en la cabeza para que no veas nada. Como cuando quedas con un mafioso, te llevan a su cuartel general y nadie quiere que sepas dónde está.


Así que, no ves. No oyes, porque todo está en silencio. Y te dicen que te pongas a la pata coja, como un flamenco, durante 45 o 50 minutos.

Eso el primer día. He dejado de leer lo que hacen el resto del día y los 4 siguientes. No lo juzgo. Pero no creo que me presente candidato.


En cambio, mi secta sí que va a tener sentido. Te voy a pedir que vengas, que me expliques tu vida, que me detalles todo lo que te has roto, esguinzado, luxado, contusionado o desgarrado. Seré pesado, quiero saberlo todo.
TO – DO.


Y a partir de ahí, te voy a someter a una prueba de fuerza y movilidad completa. Veré si eres válido para entrar en la agogé. Como los espartanos.

En caso contrario, te desterrará a tu suerte en el Mar Egeo.


Bueno, no. Da igual el resultado, voy a intentar arreglarte.
Eso sí, debes estar dispuesto a pasar este rito de iniciación. En caso contrario, no podrás ser un Casi Deportista.


En caso de que te estés pensando entrar en mi secta, tengo un documento secreto. Es una plantilla con preguntas tipo Si/No. Sabrás en menos de 5 minutos, qué recomendaciones generales tienen sentido en tu caso particular. 

Y da igual que quieras verte más sexy, huir despavorido del dolor o disparar tu valor en el deporte que practiques.


Aquí debajo.

 

P.D: Había pensado en parecerme más a los Iluminati, pero esos son tan secretos que nadie sabe si existen de verdad. Y no. Yo quiero ser visible, no vaya a ser que no me conozca nadie.

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