¿Tú también eres de esos que tienen la obsesión por escalar un gran pico?
A mí, realmente, me da bastante igual eso.
No tengo ninguna necesidad de ir a pasar frío a ninguna parte y no se me ha perdido nada en un lugar en el que no puedes respirar sin mascarilla.
Si es que hay cosas que considero absurdas.
Como lanzarte en paracaídas.
Ojo, ojito, ojete.
No estoy diciendo que seas imbécil por hacerlo.
Si te gusta, adelante.
Si lo disfrutas. Adelante x2.
Pero yo paso.
Algo parecido me pasa con el cine de terror.
¿Qué necesidad tengo de ir a un sitio a pasarlo mal?
Te contesto, ninguna.
Como parir sin anestesia.
¿En serio? ¿Qué necesidad hay?
Oye, que a la que le guste y lo viva como algo súper bonito, adelante x3.
Yo jamás pariré sin anestesia.
Ni con anestesia tampoco.
Lo que está claro es que, para todas estas cosas, existe algo que es fundamental.
Algo sin lo que no vas a poder hacer ninguna de ellas.
El denominador común que las une.
Y cuando descubres cuál es, todo se vuelve mucho más sencillo.
Todo encaja, ves con claridad todos los pasos que debes dar para conseguir aquello que, aparentemente, es casi inalcanzable.
El secreto mejor guardado, y a la vez totalmente visible, de las personas que consiguen grandes éxitos.
Te lo explico dentro de las frikadas que se dicen en el espacio del Casi Deportista.
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