¿CEBOLLA EN MI TORTILLA DE PATATAS?

Existen dilemas vitales que van más allá de cualquier razonamiento. Más allá del bien y del mal.

Algunas de estas cuestiones, que no te dejan vivir serian:

¿Cuántas franjas de papel higiénico coger en función de lo acontecido?

O

Si me despierto por la noche y tengo mucho pis, ¿me levanto aún sabiendo que puedo despejarme o me aguanto?

O

¿Me pido una cerveza o un café?

O

¿Elijo la película que le gusta a mi pareja sabiendo que se va a dormir dando por sentado que al final la acabas viendo tu?

O

Si viene gente a casa y preparo un pica pica, ¿le pongo o no le pongo cebolla a la tortilla de patatas?

Porque la gente que odia la cebolla tiene un detector infalible en sus pupilas gustativas. Aunque la tritures, aunque le pongas una milésima parte y 7 patatas.

Aunque lo intentes disimular quemándola…

Lo notan.

Y se que es así. Yo odio el pescado y cuando como algo que haya estado en contacto, aunque sea muy poco, con un plato de pescado…

RIP, eso ya no me lo como.

Otra de las grandes cuestiones es si usar faja o cinturón lumbar en el trabajo o en algunos ejercicios de fuerza o por el contrario no hacerlo. Pincha en el link de la bio para saber que dicen los estudios sobre el uso del cinturón.

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